Toshiro Kanamori, ¿Otra educación es posible?

Está claro y no parece muy discutible que el sistema educativo actual (por lo menos en España) está desfasado, anticuado y fracasa con más asiduidad de la que debiera. 

Pero parece que nadie es capaz de encontrar soluciones... desde el gobierno los cambios en el sistema son meramente políticos y superficiales, en incluso se reduce el dinero y los recursos; desde los colegios, tampoco tienen un margen muy amplio de actuación, restringidos por las leyes educativas y la competitividad social y empresarial; y finalmente desde las "escuelas de maestros", desde las universidades, todo son buenas palabras pero nada real, ninguna alternativa.

Es por esto que sorprende, y merecen ser destacados aquellas pequeñas muestras que prueban que con pequeños detalles se puede cambiar mucho.

Por suerte cada vez son más los proyectos de comunidades de aprendizaje y otras experiencias, que pretenden dar la vuelta a un sistema educativo, que deja mucho que desear.

Este es el caso de Toshiro Kanamori

Un maestro Japonés que decidió que no sólo vale con instruir conocimientos, si no que hay que educar para la vida.

En la Escuela Municipal de primaria en Kanawara, una ciudad de 8.000 habitantes en Japón, Toshiro Kanamori ha conseguido unir aprendizaje con diversión, con respeto a la individualidad de cada niño y con gran crecimiento personal de sus alumnos.

Explica que solo tenemos una vida y que debemos vivirla con alegría pero que la felicidad no consiste en buscar únicamente el beneficio individual sino en aprender a pensar en los demás.

¿Cuál es su método de enseñanza? 

En el documental se aprecia mucho trabajo al aire libre y en equipo, potenciar la creatividad y principalmente el sistema de “LAS CARTAS DEL CUADERNO” en que los alumnos escriben cada día una carta explicando sus vivencias e inquietudes y las leen en alto a sus compañeros.

Aquí tenéis el documental de 50' realmente recomendable.

*Agradecimiento a http://www.elblogalternativo.com por su análisis del documental.

¿Aceptaríamos los padres que a nuestros hijos les enseñasen prioritariamente a ser felices en vez de asignaturas académicas útiles de verdad?

¿Interesa al Sistema nuevas generaciones de ciudadanos con empatía, responsabilidad social y con vidas más plenas que son menos manipulables y consumistas?

¿Crees que es posible un cambio profundo en el sistema educativo?

Y tú, ¿Qué opinas?